Los problemas no existen…
Una de las características del coaching nutricional es ver los “problemas” como “Oportunidades de aprendizaje”. Lo que nos sucede no es bueno ni malo, sino que forma parte de un proceso. De toda experiencia podemos aprender, pero especialmente de aquellas que nos resultan una dificultad, una pérdida, un obstáculo… en definitiva, un problema.
Por ejemplo, si has decidido cuidar tu alimentación y hacer ejercicio para perder peso, es muy probable que en muchas ocasiones tengas la sensación de fracaso por haberte “saltado la dieta” o por no haber ido al gimnasio. Además, solemos vivir estas situaciones, respecto a nuestro objetivo de adelgazar, como un “Volver a empezar”.
¿Qué diferencia habría si estos obstáculos los enfocas con mentalidad de aprendizaje? ¿Cómo actuarías en ese caso? ¿Cómo enfocarías tu camino hacia un cuerpo más sano y delgado?
Las respuestas a esas preguntas son parte del enfoque del coaching nutricional. La pérdida de peso, la decisión de cuidar y mejorar tu alimentación,… son un proceso y como tal, cuando nos topamos con una dificultad (“saltarme la dieta”) no comenzamos de nuevo, sino que continuamos el camino, el proceso. Esto hace que tus sensaciones sean completamente diferentes, ya que volver a empezar una y otra vez es agotador y frustrante.
Además, podemos ver esa situación (“saltarme la dieta”) como un aprendizaje:
¿Qué debo aprender de lo que me ha pasado?
¿Qué puedo hacer diferente cuando me vuelva a encontrar en una situación similar?
¿Qué recursos puedo aplicar?…
Si enfocamos nuestros problemas o dificultades de esta manera nos sentiremos mucho mejor y esto nos ayudará a seguir con el camino que nos hemos propuesto y nos dará más garantías de éxito.
En relación a todo esto os recomiendo leer este artículo de Borja Vilaseca… (Haz clic aquí para saber más).
Gracias Sonia Foix por compartir